Bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es uno de los mejores remedios caseros para eliminar el sarro de los dientes.
Necesitarás hacer una mezcla de dos partes de bicarbonato de sodio por una de sal, mezclándolo todo bien con un poco de agua.
Sumerge el cepillo de dientes en la mezcla y pásalo por las zonas donde se haya acumulado el sarro.
Es muy importante recordar que después debes enjuagarte bien la boca, preferiblemente con un irrigador dental, ya que no debe quedar ningún rastro de bicarbonato de sodio, ya que al entrar en contacto con el cliente puede dañar el esmalte.
Zumo de limón
El limón tiene fantásticas propiedades bactericidas, así que en este caso, mezcla el zumo de medio limón con unos 150 ml de agua y úsalo para enjuagarte la boca como si fuera un colutorio.
En el caso del limón, también puede dañar los dientes porque es un ácido, por lo que debes enjuagarte bien la boca después de usarlo.
Agua oxigenada
Preparamos una mezcla con unos 100 ml de agua y 30 ml de agua oxigenada y los enjuagamos con ella, desinfectando así y eliminando el sarro.
Recuerda enjuagarte bien la boca una vez hayas terminado.
Causas de la acumulación
Existen diferentes causas para la acumulación de sarro, entre ellas:
Mala higiene bucal.
Las personas mayores son más propensas a la acumulación de sarro.
Problemas de sequedad en la boca.
Consumo de tabaco.
Aparición de dientes mal posicionados o torcidos.
Falta de vitamina C.
Mala nutrición.
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